Estas sensaciones pueden ser preocupantes, pero no siempre es necesario acudir a urgencias. Afortunadamente, si se ha lesionado, hay formas de aliviar y tratar su dolor en casa.

5 formas de tratar las lesiones de los pies en casa

El método RICE 

 estás son las siglas de reposo, hielo, compresión y elevación.

 Este es un método que puedes utilizar en casa para aliviar el dolor y la inflamación del pie. Intente descansar el pie lesionado todo lo posible, refrésquelo con frecuencia, utilice un vendaje estático o elástico para reducir la hinchazón y manténgalo sobre el corazón para reducir el flujo sanguíneo a la zona lesionada.

Vinagre de sidra.

 Si tienes un espolón en el talón, deberías probar esto una vez. El vinagre de sidra puede favorecer la liberación del calcio extra del hueso y así aliviar el dolor. Prueba a poner una cucharadita en un cubo o bañera de agua caliente y a sumergir la lesión del pie en esta agua, o a envolver el pie en una toalla/venda empapada en vinagre de sidra.

Remojo con sales de Epsom

 Durante los primeros días, aplique siempre compresas frías sobre la lesión, pero después de unos días, pruebe a sumergir el pie o el tobillo en una bañera o tina con agua caliente y sales de Epsom. La sal de Epsom tiene propiedades curativas y puede ayudar a aliviar los músculos doloridos y el tejido conectivo. También puede aliviar la rigidez de las articulaciones. 

Utiliza lo que hay en tu armario

 ¿Sabías que muchos de los utensilios que tienes en tu cocina tienen propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a curar una lesión en el pie en casa? Por ejemplo, para reducir la hinchazón del pie, puedes probar una mezcla de ajo, cebolla en polvo, aceite de ricino/oliva y cúrcuma. Caliente esta mezcla en la cocina o en el microondas y aplíquela suavemente en el pie o tobillo lesionado. 

Envuélvelo en una venda y mantenlo en alto durante varias horas. No se trata de una solución garantizada, sino de una alternativa natural a los medicamentos de venta libre.

Coma más alimentos antiinflamatorios

Los ingredientes mencionados anteriormente son conocidos por sus potentes propiedades antiinflamatorias. Si cocinas con estos ingredientes más de lo normal cuando tienes una lesión en el pie, puedes promover la curación y reducir la inflamación. 

 Para un tratamiento más concentrado, puedes disolver una cucharadita de jengibre o cúrcuma en polvo en agua. Puede que no sepa muy bien, pero puede ayudar como remedio natural si el dolor vuelve a aparecer.